miércoles, 16 de diciembre de 2015

Enfermedad de Best


Hoy toca hablar de algo que directamente no está relacionado con el deporte, pero que es la causa principal por la que hago deporte paralímpico. La enfermedad de Best es lo que padezco en la vista, que me impide ver correctamente y lo que me crea la necesidad de competir atado a alguien.

Dado mi nulo conocimiento de medicina, y creo que no es momento de ponernos muy técnicos, trataré de explicar en qué consiste, como afecta y de alguna forma contestar a aquellas preguntas que en los últimos años me han hecho. Como decía es una enfermedad que afecta al ojo en la parte interior, concretamente al epitelio pigmentario. Resumiendo mucho, estas capas se separan y aparece un líquido entre ellas.

Esto es la parte más “técnica” pero lo realmente importante, cómo afecta? Pues esto produce una pérdida de visión, tanto de agudeza (definición con la que vemos las cosas) como de campo visual (la cantidad de cosas que llegamos a ver). Sobre todo a la visión central, lo que dificulta, por ejemplo, leer. Otro de los problemas típicos es la dificultad a adaptarse a los cambios de luz, es decir, pasar de oscuridad a mucha luz y a la inversa. Evidentemente, de noche, con menos luz, los problemas se agravan. Si una persona normal ve menos de noche, pues con dificultad visual aun vemos menos.


Es una enfermedad degenerativa, va a más con el paso del tiempo. De hecho hasta hace pocos años yo veía bastante más que ahora (en mi mejor época llegué a tener un 60% de visión) y en los últimos dos años he seguido perdiendo visión. Puede evolucionar o no. Por ejemplo mi hermano también tiene la misma enfermedad y lo tiene estable desde que nació. Hasta dónde puede llegar? Ceguera total no, pero sí que se puede cargar toda la visión central.

Es une enfermedad genética y hereditaria, por eso mi hermano también la tiene. Pero no conocemos ningún caso de mi familia que la tuviera, al menos desarrollada. No tiene solución, no existe operación, ni corrección mediante gafas (por eso siempre me río cuando oigo eso de “no te ves bien?, pues ponte gafas”). La única solución es asumirlo y vivir con ello, os aseguro que se puede y muy bien.


Para poner una nota de humor, una curiosidad. Best en inglés quiere decir “el mejor”. Lo sé, me pega, la enfermedad me va como anillo al dedo ;)

domingo, 29 de noviembre de 2015

Deportista Paralímpico


Cuando alguien descubre qué es exactamente un deportista paralímpico, a lo que se dedica y sus logros, su reacción puede ser de dos tipos: admiración porque se trata de una persona fuera de lo común, que hace algo escandalosamente grande, un “crack”. O por lo contrario puede pensar que todos los logros deportivos los ha conseguido únicamente por su condición de paralímpico, porque ahí no hay competencia y que en condiciones normales no sería nadie deportivamente.

Ambos pensamientos tienen una parte cierta y otra de desconocimiento. Incluso me atrevería a decir que tienen conexión entre ellos. Quizás yo no sea la persona más apropiada para hablar acerca del deporte paralímpico, ya que esta temporada que vamos a empezar va a ser mi tercera como tal. Pero esa fase que he vivido, de pasar del deporte convencional (me niego a decir “válidos”) al deporte adaptado, me da un punto de vista diferente.

No es que seamos unos fuera de serie, ni ejemplos de superación, pero os puedo asegurar que el simple hecho de “ir a entrenar” no es lo mismo cuando tienes algún condicionante tan grande como que te falte una pierna, un brazo, vas en silla de ruedas o te falta un sentido. Estas cosas son las que no se ven cuando un paralímpico sube a un pódium en un campeonato del Mundo de lo que sea. Nos quedamos en que es un “crack” porque ha ganado aun faltándole lo que sea o por lo contrario que ha ganado porque en total compiten 10.

No es mentira que en nuestras competiciones la participación no es muy grande. En muchos campeonatos hay categorías donde, o no compite nadie, o hay únicamente uno. Nosotros somos los primeros que no nos gusta competir solos, ya no es una competición. Pero también sabemos por qué ocurre esto. La dificultad antes citada para poder entrenar o la inexistencia de premios económicos en nuestras competiciones, esa sensación de estar continuamente remando a contracorriente, hace que el porcentaje de deportistas paralímpicos sobre la población que puede serlo (gente con discapacidad) sea baja. Y muy pocos de pocos da esto como resultado, campeonatos del Mundo unipersonales.

Personalmente me quedo con una definición para los deportistas paralímpicos: rebeldes. Personas que decidieron no bajar los brazos con sus condiciones y que avanzaron por el camino de la lucha constante, persiguiendo sus sueños que no son otros que vivir la vida, esa que sólo vivimos una vez, al 110%. Pero decidme, tiene esto algo que ver con el deporte? ;)


viernes, 13 de noviembre de 2015

Gracias por esta temporada


En breve empieza la nueva temporada, pero antes de empezar y publicar muchas de las novedades para este próximo año, toca agradecer a todos los que han estado a nuestro lado y nos han acompañado en este intenso y emocionante viaje.

Nuestro principal patrocinador ha sido el ayuntamiento de Serra, mi pueblo.  Llevar el escudo en el mono ha sido una responsabilidad y un orgullo. Espero que Serra sea un poco más conocida en el mundo del triatlón.


Una de las claves de esta temporada ha sido la prevención de lesiones. Esto es gracias a las manos de Manuel Lujan (Fisiolujan). Seriedad, buen trabajo y compromiso.

Hemos sido muy afortunados de contar con el mejor mecánico de Valencia: Bicicletas Lluch, en la Pobla de Farnals. La persona más trabajadora y que mejor ajusta el cambio que he conocido.



Los primeros que apostaron por nosotros y decidieron sumarse al proyecto fueron 42k running. Os invito a conocer sus camisetas tope de gama, mejor incluso que otras grandes marcas.

Otras empresas e instituciones también nos han echado una mano: ONCE Valencia, Pilar Brisson, Club de Campo "La Carrasca", Triesport Roquette y CEA Bétera.


Y por supuesto todo el equipo humano que tengo detrás. Sin ellos sería imposible (de verdad). Roberto a la cabeza, aguantándome durante todo el año, sacrificando su temporada y entrenamientos. Ana, que me hace sufrir con sus entrenamientos, pero que ha conseguido sacar petróleo de donde no había nada. Mi familia, con mi padre, madre, hermano y tío a la cabeza. Sin olvidarme de mi abuelo, el cual nos dejó hace nada, pero que seguirá siendo un pilar fundamental. Y tanta gente que no aparece en redes sociales pero gracias a ellos he podido hacer cosas tan simples como ir a la piscina y tener una vida algo más normal. Repito, imposible sin su ayuda. Entro todos hemos hecho un mecanismo perfecto, que seguirá moviéndose. 

viernes, 25 de septiembre de 2015

Campeonato del Mundo de triatlón


Después de la gran alegría del miércoles, afrontábamos la gran cita del viernes con menos nervios. Ya conocíamos los circuitos, boxes y toda la zona. A nivel de desgaste físico pensamos que no nos afectó demasiado. El miércoles por la tarde y el jueves fuimos al fisio de la selección para recuperar (gracias Bodo!). Esto, más un rodaje suave con el tándem y en la piscina nos dejó perfectos.

La noche anterior fueron todo nervios. El clima había cambiado radicalmente, tormenta y de las fuertes. Durante la tarde no paró de llover. Cuando nos acostábamos parecía de día de los relámpagos que había y el comentario común era que el día siguiente haríamos un duatlón. Con estas noticias nada alentadoras nos dormíamos sobre las 10 de la noche.

A las 4 de la mañana despertábamos y la tormenta seguía, aunque sin llover. Preparamos la mochila con todo más unos calcetines por si acaso había duatlón. Llegamos a la zona y cuando empieza a amanecer la tormenta ya ha remitido y se hará el triatlón. Bien, esto nos llena de energía. Todo preparado en boxes y a la salida.


A las 7:05 se daba nuestra salida. Con la experiencia del miércoles teníamos claro que la larga recta había que afrontarla de menos a más, y así fue. A mitad recorrido me doy cuenta que tenemos pegados a mi izquierda a alguien. Nos intercambiamos algún golpe (pero con Roberto!) pero salimos del agua con la sensaciones de haber nadado mejor que el miércoles. Luego veríamos que bajamos 40 segundos el tiempo y que hicimos el tercer mejor parcial de natación a escasos segundos del primero. Si hubiera nadado en agosto… (Sin excusas)

Subimos al tándem pegados a los terceros y con muchas ganas de demostrar la mejora sobre las dos ruedas. Muy a nuestro pesar no fue así. El circuito eran 4 vueltas y media totalmente llano, con 3 giros de 180º y dos de 90º. Queda clarísimo que nos falta potencia y kilómetros en las piernas. Toca seguir trabajando!

Nos bajamos a correr sextos y desde la primera zancada notamos ambos que hoy las piernas sí que responden. Vamos a muerte, es un mundial, no podemos guardarnos nada. A mitad de la segunda vuelta nos adelanta un rival, imposible seguirle (17 en el 5000), de momento. Contentos con el tiempo de carrera, circuito un poco largo que corrimos con ganas y arriesgando. Aunque sabemos que tenemos mucho margen de mejora.



La entrada a meta fue brutal, algún día me voy a partir las costillas de los golpes que me doy en el pecho. Además, la foto que nos hizo la organización resume muy bien el sentimiento que ambos teníamos. Primer año, Mundial y Europeo, queda mucho trabajo para estar arriba del todo, pero ganas y potencial de mejora tenemos. Esto simplemente ha sido un gran empujón al inicio del camino.

martes, 22 de septiembre de 2015

Subcampeones del Mundo de Acuatlón


Impresiona sólo de ver el título, casi tanto como nos impresionó ir al campeonato del Mundo en Chicago. Iremos desgranando poco a poco nuestra experiencia en los mundiales. De momento la crónica de la primera competición y, de momento, nuestro mayor título.

Decidimos inscribirnos en el acuatlón por varios motivos. Era dos días antes del triatlón, la competición importante, por lo que nos servía de entrenamiento y prueba perfecta para el viernes. Además, era nuestra competición, nadar y correr, perfecto. El formato era 1km nadando y 5k corriendo, que se vio reducido en la natación a 750m.

A las 10:25 del miércoles se daba la salida. Habíamos hablado mucho de la estrategia d carrera, pero aquí hay poca, ir a tope todo el rato. Apenas es media hora de competición. Empezamos en el agua fuerte, una única salida para todas las categorías e intentamos distanciarnos de nuestros rivales para poder correr con cabeza. Yo sabía que no iba a estar fino, ya que estar todo el mes de agosto sin nadar no me iba a favorecer nada. Así fue, tiempo bastante peor de lo que solemos hacer y sobre todo, salir del agua muy tocado.


Aun así salimos primeros de nuestra categoría y segundos de la general. Aunque Roberto ya me avisa que nuestro principal rival lo tenemos detrás. Transición rápida y empezamos a correr. Mal desde el primer metro. Voy ahogado, sin buenas sensaciones, me cuesta correr fluido y no hablemos de respirar. Roberto va muy bien, me anima, me controla respiración y me hace correr. A mitad de la primera vuelta nos pasan nuestros amigos y rivales (por ese orden) Dani y Jon. Hacemos intención de seguirles, pero yo no puedo. Se nos van, aunque no demasiado. Casi al final de la primera vuelta empiezo a recuperarme, a poder estirar la zancada, respirar bien y a correr a los ritmos que tengo en las piernas.

Recortamos bastante tiempo, nos ponemos segundos de la general y de nuestra categoría, apretamos hasta el final y entramos a 30 segundos del oro. Aunque es inevitable pensar que hubiera pasado si en agosto hubiera nadado, un subcampeonato del Mundo es premio más que suficiente a nuestra corta pero intensa trayectoria.

Roberto dice que me emocioné un poco en la recta de meta, pero eso lo negaré siempre. En esos segundos te vienen a la cabeza todos esos momentos duros, horas de entrenamiento, derrotas morales, decepciones y tienes muy claro que TODO vale la pena. Ojalá hubiera estado allí toda nuestra gente para disfrutar el momento con ellos. Pero hace tiempo me dijeron que no hace falta estar para ser, y así es.

viernes, 11 de septiembre de 2015

Campeones autonómicos de triatlón


Con un mar de dudas y muchas incertidumbres nos presentábamos el pasado sábado en el triatlón de Valencia. Era el campeonato autonómico de paratriatlón, por lo que no podíamos fallar, defendíamos título. Tan solo dos días antes me quitaban la escayola y apenas pude probar a nadar, sirvió para decidir que correría con férula.

Nuestra salida era a las 10:35 y tras dejar todo preparado en boxes nos dedicamos a relajarnos, desconectar y calentar en condiciones. A la hora prevista vamos a cámara de llamadas y allí vemos que éramos los únicos sin neopreno, primer error grave. Tal como estaba me hubiera ayudado mucho, pero ahora ya no había solución. Nos colocamos bien y empieza el Rock& Roll.


Salimos fuertes, como siempre. Llegamos a la primera boya, que no está muy lejos, y voy bastante entero, sorprendido y con ganas, pero al llegar a la segunda empieza la tortura. Es el tramo más largo (unos 500m) que se me hacen eternos. Me cuesta coger agua, deslizar, se me carga el brazo izquierdo y no encuentro sensaciones. Luego viendo los tiempos así lo demuestra, que un mes sin nadar era demasiado. Salimos, yo bastante tocado, pero con muchas ganas de coger el tándem.

Transición rápida y a volar por el circuito de fórmula 1. Desde el primer momento las sensaciones son muy buenas, la parte positiva de haber estado un mes escayolado es que el rodillo ha sido mi mejor amigo. Vamos muy rápidos, demasiado para el nivel de la prueba, picos de más de 50km/h y rodando al lado de gente con bici de montaña y sin experiencia. Nos hartamos de dar gritos para que nos den paso. Perdón si asustamos a alguien, pero mejor eso que provocar una caída.


Llegamos a la segunda transición y por lo que me dice Roberto llevamos bastante tiempo a nuestros rivales. Empezamos a correr y el primer tramo es una locura. Un pasillo muy estrecho, con maceteros enormes y con mucha gente alrededor. Aquí es donde Roberto se lució, simplemente me tuve que coger fuerte de su brazo y él me llevó perfectamente. El resto de circuito fue duro, pero por mi falta de ritmo de carrera. Aunque no había dejado de correr, no lo hacía a mis ritmos. Roberto aprovechó para vengarse de cuando yo le he apretado más. Sufriendo bastante, pero un buen test de cara al Mundial.


Luego contaba que era el triatlón donde más he sufrido, pero también es verdad que fue el más especial de todos. Correr “en casa” siempre es especial y si encima es rodeado de los tuyos, pues todo el sufrimiento cobra sentido.

domingo, 30 de agosto de 2015

Levantarse tras la caída


Este mes de agosto será difícil de olvidarlo. Como todos sabéis empezó con una rotura en la mano el día 2 mientras entrenábamos con el tándem. El mes que teníamos marcado en rojo, ya que disputabamos el campeonato de España, paso a ser diferente pero no peor.

La caída fue lo más tonta posible y con mucha mala suerte. Íbamos mi hermano y yo desde Lliria a Marines cuando circulando por una vía de servicio, tocamos barro y perdimos el control de la rueda delantera. No íbamos rápido (menos de 30km/h) pero yo me di cuenta que caíamos y puse la mano. Desde el primer momento me di cuenta que algo había ahí dentro. Rotura en el primer metacarpiano de la mano izquierda (dedo pulgar). La parte positiva, que lo de mi hermano quedo en rascones.

A partir de ahí empezaba lo bueno. En el primer momento eran seis semanas con escayola, lo que nos dejaba fuera del campeonato de España, el triatlón de Valencia y del hipotético Mundial. Un jarro de agua fría. En esos momentos es cuando te das cuenta de lo importante que es estar rodeado de grandes personas. Toda mi gente me hizo ver que lo que había conseguido hasta ahora era mejor que cualquier sueño, y así era.



Afortunadamente no había desplazamiento en la rotura y conseguimos acortar algo los plazos. Por si acaso, y la gente que me conoce sabe que era imposible que fuera de otra forma, no dejé de entrenar. Salvo nadar podía hacer de todo: bicicleta estática, abdominales, ejercicios de fuerza e incluso correr. La gente debe pensar que estoy loco corriendo con escayola, mucho no se equivocan.

Y llegó el gran día, el 17 de agosto. Volvía de correr y tenía en el móvil varios Whatsapp, especialmente uno de mi amigo Llambrich, avisándome que nos habíamos clasificado para el Mundial de triatlón en Chicago. Indescriptible. Si llego a ser de lágrima fácil, me cae alguna y todo.


Ahora estamos ya en la recta final de la preparación. Estamos corriendo igual o mejor que antes del accidente, en bicicleta mejor que nunca y nadando confiamos mucho en que nuestro nivel siga donde lo dejamos. Si algo queda claro es el poder de la cabeza y esta se encargará de volvernos a hacer nadar como nosotros sabemos.

sábado, 18 de julio de 2015

Campeonato de Europa de triatlón


El miércoles de la semana anterior recibíamos la llamada. Ya lo habíamos prácticamente descartado, demasiado premio para nuestra primera temporada. Pero a veces los sueños se cumplen y aquello que a principios de temporada parecía tan lejano, era ya una realidad. Decidimos viajar en coche, por el alto precio del avión y por evitarnos los problemas de transportar el tándem.

El miércoles por la tarde salíamos y llegábamos a las 4 de la madrugada. Directos a dormir e intentar recuperar. Jueves día de reunión técnica, reconocimiento de circuitos y descansar de nuevo. Circuito de natación con un tramo con mucha corriente en contra y oleaje y otro al contrario. Bici llana, con una ligera subida y carrera a pie con muchas curvas y una rampa que se hacía dura. Bueno, es lo mismo para todos, así que tocaba aprovechar nuestros puntos fuertes.
Competíamos viernes a las 16:00 por lo que a las 12:30 estábamos comiendo en el hotel. Preparamos todo y a boxes. Teníamos que aprovechar el primer tramo con corriente en contra para marcar diferencias. Aunque el lago estaba bastante más tranquilo que el día anterior, nadamos mejor que nunca e hicimos el mejor parcial de natación de toda nuestra categoría. Salíamos con la bici cuartos (habían 3 rivales B1 que salen 3min18seg delante). Nos cantan en boxes que hemos recortado delante y tras una transición rapidísima, salimos a darlo todo en la bici.

Intentamos no pensar que llevamos el peor tándem y material con diferencia de toda la competición. Seguro que por ganas no será. Pero desde el primer momento me doy cuenta que algo no funciona bien. No puedo hacer fuerza pedaleando. Intento no sacar la cabeza de la carrera y dar el 200% pero enseguida me doy cuenta de lo que pasa. Mi sillín se ha bajado. No apreté bien el tornillo y lo llevaba unos 5 dedos bajado. Apenas puedo estirar la pierna, noto que me aparecen dolores extraños en las piernas y que ni mucho menos puedo aprovechar toda la fuerza. Decido no decirle nada a Roberto para no sacarlo de la carrera, pero lo que sí que nota él es la falta de fuerza. Esto hace que tenga que hacer un sobresfuerzo para compensar.

Nos pasan dos rivales y perdemos mucho tiempo. Intento no pensar en lo que he pasado, el grave error de novato. Estamos en un europeo, clasificados a base de sudor y mucho esfuerzo, esto es un premio. Escucho a mi padre en la transición y me vuelvo a animar. Empiezo a correr fuerte, quiero quitarme el mal sabor de la bici. Pero el sobresfuerzo de Roberto se iba a notar y no le deja correr como él sabe y ha entrenado. Aun así me guía perfectamente en un circuito dificilísimo y conseguimos llegar a meta séptimos.


Después tocó celebrar las buenas posiciones y medallas del resto de españoles. Para nosotros compartir selección con todos estos ejemplos, como personas y deportistas, es un orgullo. Eva, Rakel, Su y May, Vicente (valencianot!), Alex, Dani, Toni, Jairo y especialmente Dani y Jon, que nos demostramos en todas las competiciones que, pese a ser rivales, fuera de la carrera somos grandísimos amigos. Y no podemos olvidarnos de todos los que no vinieron. Todos se merecen tanto o más que cualquiera de nosotros estar ahí y más temprano que tarde, estarán dando guerra en las grandes citas.

miércoles, 10 de junio de 2015

World Paratriathlon Event Besançon

 
Hasta el miércoles de esa misma semana no teníamos claro si finalmente asistiríamos. Las pruebas internacionales funcionan así, hay un límite de plazas y hasta última hora te pueden llamar para competir. Competíamos el domingo, así que teníamos tiempo de sobra para organizar el viaje (nótese la fina ironía). Dado que los billetes de avión estaban a precios prohibitivos y que la ONCE nos volvía a ceder la furgoneta, decidimos viajar en primera clase, pero sobre ruedas.

Salíamos el viernes justo después de comer. Para sobrellevar mejor los casi 1300km, además de Roberto, vinieron mi padre y mi tío como conductores. De momento no me dejan conducir a mí, lo seguiré intentando. Para llegar lo mejor posible, llevábamos un kit de viaje digno de mencionar: medias de compresión, electroestimulador, gel frío y comida para un ejército. A las 4 de la madrugada llegábamos, directos a dormir.

A la mañana siguiente nos reuníamos todo el equipo de paratriatlón para reconocer circuito de bici y carrera. Lo habían cambiado respecto al año anterior. Esta vez circuito llano, sin ninguna curva, dos giros de 180º y asfalto perfecto, para volar. A nosotros nos encantó. Por la tarde reunión técnica, a la cual llegamos de milagro, cena todos juntos y a descansar, que el cuerpo lo necesitaba. Parece que no aprovechamos los viajes, porque llegamos y lo único que hacemos es competir, encerrarnos en la habitación y salir para comer. Pero si queremos rendir al 100% el día de la carrera, es lo que debemos hacer.

El domingo competíamos a las 11:30, así que pudimos dormir mucho y muy bien, nos despertamos al 120%. Pronto por la zona de transición, tener todo claro y controlado y a prepararnos para nadar. Se nadaba en un río con corriente a favor, para contrarrestar esto la distancia la aumentaron hasta casi 1km, perfecto. Salimos fuertes (yo al menos) e intentar aguantar el ritmo. Salimos primeros de nuestra salida y con la sensación de haber nadado muy bien. Transición, esta vez me costó a mí un poco más de lo habitual, y a dar pedales.

Intentamos llevar un ritmo alto para que tardaran el máximo posible en cogernos por detrás. Al final de la primera vuelta nos alcanza nuestro amigo Dani Llambrich. Lo cogemos como referencia y seguimos su ritmo. A mitad segunda vuelta nos pasan los franceses, pero tampoco se nos van demasiado. Desde fuera debió ser una carrera espectacular, 3 tándems seguidos y marcándose entre ellos. Para nosotros estar ahí fue una sorpresa. Sobre el papel ambos tienen mejor nivel ciclista, pero a base de ganas y piernas pudimos aguantar con ellos y demostrarnos que estamos ahí. Al final de la última vuelta nos alcanzo a todos el tándem italiano, para así entrar juntos a la segunda transición. La carrera a pie iba a ser bonita.

Nos quedamos un poco detrás en la entrada a boxes, aun no sabemos muy bien porque, zapatillas de correr y a cazar por delante. Sabemos cómo corren nuestros rivales y el pódium estaba muy difícil, además, bajamos a correr bastante tocados, pero así es el triatlón! Primera vuelta sin ver a nadie, en un circuito lleno de giros y de trampas para los deficientes visuales. Al empezar la segunda ya vemos a los italianos y nos lanzamos a por ellos. Les pasamos e intentamos aumentar un poco el ritmo para que no se nos pongan a rueda. Apretamos dientes hasta meta y entramos 5º pero lo más importante, las diferencias con los de delante se van reduciendo carrera a carrera. Nos vemos más competitivos y fuertes en todos los segmentos.

Con esta sensación de trabajo bien hecho, satisfacción y ganas de más, las 13 horas de vuelta a casa fueron más amenas.

jueves, 4 de junio de 2015

World Paratriathlon Event London


El viaje empezó justo una semana antes, el viernes por la tarde cuando nos avisaron. Tocaba buscar vuelo y hotel para la semana siguiente! Desde ese día teníamos claro que lo más fácil del viaje iba a ser competir. Como me dice Roberto “es para lo que entrenamos”. El resto de organización es nueva para nosotros y toca hacerlo en el poco tiempo libre que nos queda entre el trabajo y los entrenamientos.

El miércoles pasamos por Bicicletas Lluch, en la Pobla de Vallbona, para que nos preparara el tándem. Lo facturamos en el avión, así que teníamos que meterlo dentro de una caja. En la imagen se ve perfectamente lo que esto supuso.

Jueves por la mañana salíamos de Manises y a la una del mediodía estábamos en el aeropuerto de Stansted (Londres). Poco después llegaban nuestros compañeros de selección y todos juntos nos fuimos hasta Londres. Una vez en el hotel, lo teníamos muy cerca de donde competíamos, montamos el tándem, comprobamos que todo estaba correctamente y a cenar y descansar. Como anécdota nos encontramos a Mario Mola y Carolina Routier paseando después de cenar, muy agradables ambos. El viernes lo dedicamos a ver los circuitos y acudir a la reunión técnica. Además de recibir la visita de nuestro gran amigo Sergio. Pronto a dormir con todo preparado para el día siguiente.

Sábado nos despertábamos un poco antes de las 7 para poder estar a las 8 en Hyde Park. Preparamos todo como ya tenemos más que estudiado, neopreno puesto y a esperar la salida. Poco después de las 9:30 empezamos a nadar. Justo antes de la salida Roberto me recuerda: “nuestra carrera” y así fue. Salimos nadando suave, pero con un punto más que en Madrid, llegamos a la primera boya y nos pasan por la izquierda una pareja. Me pongo cómodo a sus pies, pero no sé qué hago y en la siguiente los pierdo. Bueno, no pasa nada. Salimos y en la transición vemos que son los polacos y que hemos salido segundos. Muy mal no hemos nadado. Transición rápida y a pedalear.

Ya éramos conscientes de que la bici es nuestro peor sector, pero aquí nos quedó muy claro. Circuito llano, únicamente con dos giros de 180 y una curva en forma de S. Nos pasaron dos tándems y vimos que están en “otra liga”. Nosotros a lo nuestro, dándolo todo. Ya vendrán tiempos mejores (de nivel deportivo y de material). Nos bajamos a correr sin tener referencias delante, pero con mucha fuerza ambos. Primera vuelta controlando el ritmo, pero ya nos damos cuenta que el 3º muy lejos no está y vamos a por él. Las siguientes dos vueltas vamos aumentando el ritmo, viendo que recortamos por delante. Entramos a meta cuartos pero a menos de 50 segundos del pódium.

Nos hemos visto ahí, luchando con la élite mundial, peleando de tú a tú. Somos conscientes de que nos queda mucho camino por delante, mucho por mejorar y que esto no es más que el principio.


Después de esto vino lo mejor. Volver corriendo al hotel, desmontar el tándem para meterlo de nuevo en la caja, gestionar el regreso hasta el aeropuerto, cargar con todos los trastos por Londres, comer, etc. Menos mal que allí teníamos a nuestros amigos Paula y Pelayo (y más amigos suyos que nos echaron una mano) y nos facilitaron todo muchísimo. A la una de la noche estábamos en el aeropuerto. Descansamos como pudimos y a las 7 volvíamos a Valencia, cansados hasta el extremo, con las piernas destrozadas y con una sonrisa enorme. Y lo más importante, pensado ambos “todo esto ha valido la pena”.

sábado, 16 de mayo de 2015

Series Mundiales de Madrid (II)

Una vez explicado como nos fue el día previo a la gran cita, toca contar como vivimos el día de la carrera. El domingo arrancaba muy temprano. Nos habíamos puesto el despertador a las 6, pero antes de que sonara ya estabamos despiertos.

El desayuno lo llevábamos de casa. Muy temprano como para desayunar en el hotel y siempre es mejor comer aquello a lo que estamos habituados. Un poco antes de las 7 salíamos hacia la Casa de Campo y en apenas 15 minutos estábamos allí. 

Teníamos que hacer el registro de atletas: comprobar material, números, gorro, mono de competición, ruedas de repuesto, etc. Colocar todo en el box, perfectamente estudiado y medido, último repaso y a calentar. 


Neopreno, gel para activar, goma que nos une y a probar el agua del lago. Temperatura muy agradable, sensaciones muy buenas y cambio de última hora. Roberto siempre nada a mi lado izquierdo, donde yo no veo nada, pero en esta ocasión, por el sol y la suciedad del agua, decidimos cambiar.

Presentación de atletas, este momento es brutal, y a esperar nuestra salida. A las 8:30 PT5 b1 y 3 minutos y 18 segundos después arrancamos.  Habíamos hablado mucho de como afrontar la natación. Siguiendo los consejos de quienes más saben, empezamos de menos a mas, acelerando en el paso de las boyas. De esta forma llegamos a la primera boya muy enteros y nadando muy bien. Justo antes de llegar noto que alguien aparece por la izquierda, después de un intercambio de golpes (totalmente involuntarios) seguimos a nuestra marcha. Pensaba que eran los franceses, pero cuando salimos del agua veo que es mi amigo Dani Llambrich! Si este crack el año pasado me sacaba 1 minuto! Inyección de moral y volamos a por la bici. 


Rápida transición y salimos delante incluso de unos alemanes de la salida anterior. Con muchas ganas empezamos circuito de bici, pero es llegar a la zona más técnica y dura y ambos nos pasan y se nos van. Hacemos nuestra carrera, muy centrados y pensando que vamos solos. Así llegamos a la T2.

La diferencia es ya insalvable, por lo que nos dedicamos a disfrutar de la carrera, la experiencia y el simple hecho de estar haciendo deporte.

Ya vendrán mejores tiempos, de momento este es nuestro nivel. Esto nos tiene que servir para confiar en el trabajo que hacemos y seguir trabajando duro para mejorar en nuesrros puntos débiles. 

miércoles, 13 de mayo de 2015

Series Mundiales de Madrid (I)


Nuestra aventura empezaba el jueves, con una llamada del seleccionador para avisarnos que estábamos dentro. Justo el día anterior habíamos hablado y pensábamos que ya estábamos descartados y anulamos hotel, trasporte y sesión de fisio. Tocó volver a organizar todo en tiempo récord, pero bienvenido sea. Esa misma tarde visita a Fisio Lujan y el viernes por la tarde recogíamos furgoneta de la ONCE, cargábamos tándem e innumerables trastos y dirección a Serra a dormir.


Sábado temprano salíamos hacia Madrid. Este camino casi lo podría hacer yo conduciendo, tres veces en dos meses a competir a Madrid (natación, duatlón y triatlón). En esta ocasión además de Roberto y yo nos acompañaron mi padre y mi hermano. Allí nos esperaba Ana. Todo el equipo al completo (o casi al completo), la ocasión lo merecía.  A medio día llegábamos al hospital de La Moraleja. Me habían citado para clasificarme internacionalmente. Esto se trata de valorar el grado de discapacidad y encuadrarte en alguna de las 5 categorías de triatlón adaptado. Más adelante detallaremos como es este proceso.

Comimos en el hospital (bastante mejor de lo esperado) y de allí directos a la reunión técnica en la Casa de Campo. Lo que más me gusta de esto es reencontrarnos con todos los compañeros y amigos paratriatletas. No os podéis hacer una idea del ambiente tan bueno que tenemos, envidiable. Acabada la reunión fuimos Roberto y yo a dar una vuelta al circuito de bici. Circuito duro, sube y baja constante y con zonas muy técnicas. Estos circuitos no nos favorecen en absoluto, pero es lo que hay,

Cenamos en el hotel (pizza, pasta y lasaña, en plan bestia), todo el material preparado y pronto a dormir, competíamos el domingo a las 8:30 de la mañana, por lo que había que madrugar bastante (con lo que le gusta a Roberto). 

lunes, 27 de abril de 2015

Campeonato de Europa de duatlón


No me cansaré de decirlo, todo esto es mejor que cualquier sueño que hubiera podido imaginar. Competir en un campeonato de Europa, impensable hace muy poco tiempo. Ya avisamos que íbamos a ir a disfrutarlo y vaya si lo hemos hecho.

El viaje empezó el viernes después de comer. Recogimos la furgoneta de la ONCE y pasamos a por Roberto. Un auténtico lujo de vehículo. Siete plazas y el tándem sin desmontar ruedas, más ruedas de repuesto, material, ropa, etc. A mitad tarde llegamos a Alcobendas y allí estaba esperándonos el perfecto anfitrión, Marcos, un amigo de mi categoría que vive en Alcobendas. Nos guió en una vuelta de reconocimiento al circuito, enseñándonos los trucos y peligros y luego nos acompañó hasta el hotel. Sin palabras, tienes una paella pagada en Valencia.


Esta vez sí que cenamos y desayunamos bien, aprendimos de los errores de Soria. A las 9:30 estábamos ya en la zona de boxes, preparando material y saludando a todos los amigos y compañeros paratriatletas. También nos juntamos algunos de los valencianos allí presentes. Buen calentamiento y a las 12:30 en la línea de salida.


Habíamos hablado mucho de la estrategia de carrera. Corríamos solos, ritmo controlado en el primer 5000 y en la bicicleta nuestra carrera. Circuito muy técnico y duro que marcó las diferencias. Disfrutamos del circuito que nos habían preparado, ni un metro llano, muchas rotondas y badenes, todo esto obligó a Roberto a dar el máximo como piloto. Bajamos a correr el último segmento con los gemelos tocados, pero esta vez sin calambres, nos animamos y conseguimos entrar a meta en 5º posición. Lo mejor, lo competitiva que es nuestra categoría. Todos los compañeros estamos muy cerca unos de los otros y las carreras son muy divertidas.


Seguimos aprendiendo, disfrutando y creciendo, como deportistas y como equipo. Además, tenemos un equipo humano detrás impagable. Algo que nos encantó fue poder lucir los logos se nuestros patrocinadores en un evento tan importante. Muchas gracias a todos!

jueves, 23 de abril de 2015

De Soria a Europa


Lo que pasó en Soria no nos gustó nada, ni era previsible. Ni para nuestros entrenadores, la gente que tenemos alrededor, ni mucho menos para nosotros. Nos gusta mucho escribir la crónica de las carreras. Es nuestra forma de transmitir lo que sentimos cuando competimos que, aunque con mucho sufrimiento, son momentos únicos y muy felices. Pero en Soria no fue así y no teníamos ganas de escribir, pero esto no va con nosotros.

El viaje fue una pasada. Nos fuimos de viernes a domingo con los compañeros de club de Roberto, el CEA Bétera. Desde el primer momento me trataron como uno más, me hicieron sentir de la familia, con un ambiente envidiable, todo un lujo. Por no hablar los ánimos en carrera, cada muy pocos metros había alguna voz conocida animando sin importar que ellos al día siguiente tuvieran que competir. Muchas gracias amigos! Os debemos una.


Otro momento increíble fue el sábado por la mañana, cuando íbamos caminando por las calles de Soria y escuché una voz conocida: “Héctor!”. Eran mi hermano y mi padre! Habían venido de sorpresa a vernos.

El duatlón no fue lo esperado, un primer 5000 lejos de nuestro mejor nivel, una bici plagada de problemas (incluida una caída) y un segundo segmento de carrera donde los calambres apenas nos dejaban andar. Pero acabamos, no nos podíamos retirar. Mucha gente apoyándonos como para fallarles. Sabemos que lo podemos hacer infinitamente mejor y así será.


Sin ir más lejos, este sábado competimos en el CAMPEONATO DE EUROPA de duatlón. Algo que hace apenas un año no hubiéramos imaginado ni en el mejor de nuestros sueños. Así que lo vamos a disfrutar y saborear dese el primer minuto y cruzaremos meta con una sonrisa de oreja a oreja.


1+1=UNO ha vuelto y con más fuerza!

viernes, 10 de abril de 2015

Previa Campeonato España Duatlón


Después del autonómico de duatlón, llega el primer campeonato importante nacional, el duatlón. En esta ocasión se disputa en Soria mañana 11 de abril a las 13:30.

La competición se presenta muy interesante. El paratriatlón sigue creciendo, somos más triatletas paralímpicos, las carreras son más disputadas, pero lo más importante, el compañerismo no se pierde. Amigos y rivales, y por ese orden.

Como ya comentó Roberto, no tenemos un objetivo claro en la carrera. Es nuestro primer gran evento, todavía estamos en fase de adaptación y esto es sólo el principio. Hemos trabajado mucho y muy duro, así que simplemente con disfrutar, el resto saldrá solo.

lunes, 6 de abril de 2015

En Abril, Aguas Mil


Soy Rober, Héctor me deja de nuevo al mando para contaros el mes que nos espera. Como dice el refrán popular, “en Abril... aguas mil”, en nuestro caso, son lluvias de competiciones, empezamos un tramo importante de la temporada.

El fin de semana que viene estaremos presentes en el Campeonato de España de Duatlón que se disputa en Soria, este será mi segundo duatlón y en dos semanas, el fin de semana del 25 y 26 de Abril, el tercero, nada menos que en el Campeonato de Europa de Duatlón!! Menuda experiencia voy a vivir junto a Héctor. Este Campeonato se disputa en Alcobendas (Madrid).


¿Objetivos?  No nos marcamos ningún objetivo, es nuestro primer año como 1+1=UNO, estamos disfrutando del camino del cual no nos queremos salir y por lo tanto, seguiremos disfrutando de lo que hacemos en cada oportunidad que se nos presente.

Una vez termine Abril empezará, lo que realmente nos estamos preparando, los triatlones, de los cuales ya os iremos informando.

Por el momento yo me despido, deseando que paséis todos unas felices Pascuas. En breve os seguiremos contando más noticias.

Un saludo

Roberto

domingo, 22 de marzo de 2015

Semana de entrenamientos


En poco tiempo llegan las grandes competiciones de la temporada y esto se empieza a notar en los entrenamientos. Semana a semana Ana me va exigiendo un poco más, más entrenamientos y sobre todo más intensidad.

Para muchos lo que yo he entrenado esta semana no será nada y para otros una barbaridad. Ni una cosa ni la otra, pero para mí está bien.

En total 14 horas, que son menos de lo planificado ya que la lluvia nos ha dejado sin ninguna salida con el tándem. Repartidas en cinco sesiones de fuerza, cuatro de natación, tres de bicicleta (todas en el rodillo) y 2 de carrera a pie.

Como ya conté, esto lo debo coordinar con mi trabajo, pero con ganas y algún que otro sacrificio todo se puede llevar a cabo. Si yo puedo tú puedes!

viernes, 6 de marzo de 2015

Previa Campeonato España de natación



También podría haberla titulado “camino a lo desconocido” porque es así como me encuentro. No tengo ni idea de que va a pasar, que me voy a encontrar, como lo voy a hacer, ni quienes son mis rivales. Todas esas dudas me encantan, esos nervios que aparecen antes de cada competición, necesarios en su justa medida.

La decisión de competir en natación la tomamos a finales del año pasado. Dado que la otra parte del “1+1=UNO” algo sabe de nadar, había que aprovecharlo. Una forma de mantener la motivación en los entrenamientos es marcándonos pequeños objetivos que nos obliguen a no dormirnos. Primer test en Alicante a principios de diciembre y de ahí a Alcorcón al campeonato de España de Natación por autonomías.


Ana, mi entrenadora, se ha cansado de repetirme que los únicos objetivos son aprender y disfrutar. No hemos preparado específicamente la competición, no podemos descuidarnos en las otras disciplinas y esta semana hemos apretado bastante en bici y en el gimnasio. Además, mi deporte es el triatlón y entreno 2 ó 3 veces a la semana en piscina y competiré contra gente que lo hace unas 6 ó 7 veces, como mínimo.


Pero bueno, no son excusas, una vez encima del poyete (desde donde saltamos a la piscina) somos todos iguales y a competitivo y vinagre (como dicen en mi club) no me gana nadie.

jueves, 26 de febrero de 2015

Campeón autonómico de duatlón


Esto fue lo primero que le dije a Roberto nada más cruzar la meta en Moncada. Primer título que conseguimos juntos, en nuestro debut! El equipo “1+1=UNO” empieza fuerte.

Afrontábamos la competición con algo de dudas. Pero tras un buen calentamiento las sensaciones de ambos eran muy buenas. Tras algo de confusión en el momento de la salida, 30 segundos después de la salida masculina salimos todos los paratriatlétas. Ya habíamos hablado de salir fuerte para marcar distancias y tener una carrera “controlada”, pero se nos fue un poco de las manos y el primer kilómetro lo hacemos en 3’30”. Aguantamos ritmo y llegamos a la transición bastante enteros.

Teníamos a todo el equipo dándonos referencias de como venían por detrás. Vamos con tiempo, pero no podíamos dormirnos. Transición rápida y a pedalear. Conocemos el circuito y sabemos lo que nos espera. Curvas muy cerradas, alguna rampa, carretera en algunos tramos en muy mal estados y dos baches enormes en una bajada muy pronunciada. Apretamos en los sitios que la carretera lo permite, no tiene sentido arriesgar más de lo necesario. La sensación es de ir muy rápido y adelantar a la gente con mucha facilidad.


Llegamos a la segunda transición y Roberto me avisa que tiene los gemelos al borde de la rampa. Le digo que aguantamos, pero es mentira. Bajamos a correr y vamos rapidísimo. En nada noto que Roberto está al 100% y vamos volando hacia la meta.

Nos encantó la barbaridad de ánimos que recibimos de todo el mundo. Espectadores, compañeros, rivales y otros duatletas. GRACIAS! No os veo, pero sí que os oigo y nos dais mucha fuerza.


Para acabar tocaba subir al pódium y para ello estrenábamos camiseta de 42k running de manga larga. Una pasada de camiseta. No me canso de decir lo cómodas y transpirables que son. Además de 42k running, agradecer a Fundición Montserrat, Pilar Brisson Boutique, Bicicletas Lluch, Fisio Lujan y ONCE Valencia su ayuda. Y por supuesto a Ana y Jordi, nuestros entrenadores, sin ellos sería imposible.